Francisco Javier Ayuela Azcárate
La situación geopolítica actual está presidida por la competición estratégica entre las grandes potencias. La Alianza Atlántica debe llevar a cabo una nueva transformación para adaptarse a esta realidad. En la reunión de Londres del pasado diciembre, los aliados señalaron las “oportunidades y desafíos” que supone para la Alianza Atlántica el poder emergente de China, aspecto que aparece por primera vez en una declaración política de la organización. La necesidad de llevar a cabo una revisión estratégica que actualice las finalidades de la Alianza constituye el principal resultado de la citada reunión. Esta reflexión debe dar respuesta a dos cuestiones complejas y políticamente esenciales: el compromiso de Washington para mantener a la OTAN como un elemento básico de su gran estrategia y la relación que debe tener la Alianza con Rusia y China. (Leer más)
Comments